domingo, 15 de julio de 2007

Desarrollo insostenible

Una ventaja de la globalización es que, en un mundo globalizado, los países más poderosos no podrán seguir aprovechándose de los recursoso mundiales como han venido haciendo gracias a su dominio del sistema.


El consumo es sostenible cuando no supera el ritmo de regeneración de los recursos, algo que quedó muy lejos el siglo pasado. Existe un límite demográfico que aún no somos capaces de cuantificar, pero, con un creciminnto exponencial de la población, seguramente ya no estamos muy lejos. Naturalmente, y siendo optimistas, la tecnología podría ir retrasando ese límite teórico, aumentando el rendimiento de las máquinas, mejorando el aprovechamiento de los recursos y desarrollando o descubriendo otros nuevos. Podrán aplicarse formas de cultivo hoy desconocidas o poco explotadas e incluso la producción sintética de alimentos aprovechando elementos contaminantes de la atmósfera... Pero un mundo en el que unos pocos consumen casi todos los recursos, está llegando a su fin, bien por propia evolución, bien por colapso.

En España, a causa del envejecimiento de la población -que pone en peligro las prestaciones sociales- a la falacia del crecimiento sostenible añadimos una lamentable política inmigratoria, como si no hubiera ejemplos cercanos de cómo no han de hacerse las cosas. Así, medidas como la del gobierno español de estimular los nacimientos mediante pequeñas cantidades de dinero no mejoran nada. Los habitantes dejan de tener hijos por la coincidencia de factores sociales, económicos, culturales, físicos... que no van a cambiar por ayudas como esa.

¿No nos avergüenza que nuestros gobiernos, los de países poderosos, potencien su aumento de población mientras exigen a otros que disminuyan la suya? ¿No habría sido más justo aprovechar el exceso de población de otros territorios? Con ello no se enrarecería más la población, porque si la medida del gobierno de Rodríguez pretendía ir más allá de lo meramente político (y electoralista), lo único que va a aumentar en España es el número de nacimientos de residentes.

1 comentario:

  1. Lo que le faltaba a los kikos para seguir creyendo en dios.

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